El agua, el cloro, la sal, el sol deshidratan mucho el cabello, las puntas se abren y perdemos el brillo, después del verano se hace necesario repararlo y darle unos cuidado extras. Vemos cómo reparar el daño que el verano ha hecho en nuestro pelo para devolverle la vitalidad y quede suelto y brillante.
Un tratamiento completo para nuestro pelo consta de champú, acondicionador, mascarilla y aceite.
Empezaremos con un champú reparador, Aveda DAMAGE REMEDY Restructuring Shampoo, contiene proteína de quinoa, coco y babassu que reparan y nutre el cabello en profundidad, aplicaremos con movimientos circulares sobre todo el cuero cabelludo, al ser un champú suave puedes usarlo a diario.
Tras el champú el acondicionador tiene como objetivo alisar la cutícula para conseguir un pelo brillante, el acondicionador Fusion Intense Repair de Wella, pertenece a la nueva colección de cuidados de Wella, diseñada para reparar y proteger el cabello frente a los daños. Penetra hasta el interior de la corteza, restaura al instante la fibra capilar y ayuda a evitar daños en el futuro. Revitaliza, suaviza y aporta elasticidad y resistencia frente a la rotura.
Tras estos dos pasos, aplicaremos la mascarilla. Hemos elegido la Mascarilla Nutrición Intensa de Per Purr para cabellos sin brillo. Esta mascarilla hidrata con intensidad, dejando el pelo hidratado y protegido.
Está compuesto por una combinación de proteínas de seda y avena, que reduce la pérdida de humedad y forma una película proectora, que define y da cuerpo al pelo. Contiene también aceites de Babasú del Amazonas, aguacate, argán y coco fraccionado; todos ellos son acondicionadores potentes que restauran el equilibrio del pelo. Es aconsejable su aplicación dos veces por semana y siempre de medios a puntas.
Por último, aplicaremos el aceite dry hair nourishment & defrizzer de John Masters Organics. Este aceite suaviza y elimina el frizz del cabello. Compuesto por una mezcla 100% de plantas orgánicas certificadas y aceites esenciales elegidos por sus propiedades protectoras, hidratantes y restauradoras como aceite de jojoba que hidrata el cabello, lavanda que disminuye la pérdida de cabello, trata el eczema y la dermatitis en el cuero cabelludo, romero que estimula el crecimiento del cabello, añade volumen y brillo, madera de cedro que trata el cuero cabelludo graso y la caspa.
Al igual que la mascarilla, nos lo aplicaremos de medias a puntas tanto en seco como con el pelo húmedo.
Con este tratamiento podremos reparar nuestro pelo de los daños del verano y quedará sano y brillante.